8 tips de transformación digital
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En este artículo vamos a ver 8 tips de transformación digital para empresas que te pueden ayudar para que tu negocio sea exitoso. Se trata de tips de transformación digital con los que queremos transmitir una cierta filosofía a la hora de trabajar. Aplicar estas ideas puede ser clave si tu negocio está estancado o estás arrancando con uno nuevo. ¡Vamos a verlo!
8 tips de transformación digital para empresas
1. Las herramientas son importantes, pero las personas lo son aún más
Desde Crownet no te vamos a decir que las herramientas digitales no son importantes a la hora de transformar digitalmente una empresa, porque sencillamente, no sería cierto.
Pero es importante saber que la tecnología es la que se ha de adaptar a las personas de manera prioritaria. De nada sirve un gran equipo usando una tecnología que no se adapta al workflow de la empresa. Es imprescindible poner en el centro del escenario a las personas siempre y con esto también nos referimos a los clientes. Si vas a hacer algún tipo de cambio de herramienta o de decisión, es vital que la transparencia con la que comuniques esta decisión sea total. Solo así conservarás la confianza e incluso podrás contar con un cierto feedback de los clientes.
2. No le tengas miedo al cambio, es más transmite lo valioso que es hacerlo
Cambiar es bueno. Significa avance, progreso, prosperidad, mejorar. Es cierto que ello incurre en ciertas incomodidades durante todo el proceso, pero si logras comunicar a tu equipo la importancia que supone cambiar, tendrás un terreno ya recorrido. Se supone que el cambio ha de tener un sentido, ha debido de haber un análisis previo con sus razones por las cuales hacer el cambio. Una vez hecho eso, resulta fundamental hacer entender la necesidad de llevar a cabo el cambio y que todos compren esa idea. Este es uno de los tips de transformación digital más básicos, si tienes miedo al cambio es que no has entendido nada todavía.
Puede parecer muy sencillo, pero piensa una cosa, si tienes que tratar de convencer a tu equipo y clientes de unos cambios importantes en tu empresa y no lo ven claro, detente. En ese punto vas a tener que reflexionar si es el momento o si el cambio no es del todo pertinente, en definitiva, si el cambio vas a tener que imponerlo, tendrá su consecuencias.
3. No desarrolles el cambio en solitario, haz que todos participen
Cuando se desarrolla una buena relación empresa-cliente o empresa-trabajadores resulta muy estimulante integrarlos a todos a que participen con sus ideas en el brainstorming para empezar a sacar las telarañas de la empresa y digitalizarla.
Tu equipo te va a aportar sus ideas acerca de lo que ellos necesitarían que cambie y casi siempre lo van a hacer desde un prisma del «día a día«, con lo cual es importante escucharles y ver si se pueden cubrir esas necesidades. De esta manera tendrán un sentimiento de pertenencia con el cambio y este será más familiar, por decirlo de alguna manera.
Además, podemos adoptar un marco de trabajo propuesto un reparto de roles y planificación de tareas y reuniones siguiendo unas pautas y basándose en unos valores y principios. La organización es clave, ya que participando todos a la vez va a terminar siendo imposible.
4. Deja de pensar que en 2024 las cosas se van a seguir haciendo como antaño
Esto va ligado al tercer punto, claramente. Si hemos dicho que cambiamos cosas, esta es una de las más fundamentales. Con el paso del tiempo surgen herramientas, sobre todo digitales, que pueden ayudar a gestionar áreas de tu empresa o que pueden cubrir necesidades para tus clientes de manera más efectiva.
Si decides estancarte, va a llegar un momento en el que tus competidores te van a adelantar y solo te quedará el arrepentimiento de no hacer tenido el coraje de hacer las cosas de manera diferente. Esto no significa que tengamos que empecinarnos con hacer algo de una forma que no funciona para la operativa de la empresa solamente porque es la herramienta de moda o una novedad interesante.
Por eso es tan importante el feedback de tu equipo y tus clientes, ellos, sin tú saberlo, van a hacer este trabajo por tí, en alguna medida. Recuerda tener perseverancia, confianza y mucha paciencia al principio.
5. Herramientas sí, pero sin volvernos locos
Hay veces que las empresas se meten dentro de un cambio y resulta ser una vorágine de nuevas herramientas que no son todas necesarias o imprescindibles. Debemos contar con herramientas nuevas, pero cuantas menos necesitemos y cuanto más sencillas sean, mejor que mejor. Se trata, en definitiva de cubrir las necesidades de la empresa sin volvernos locos. La clave para no equivocarnos en este punto suele girar en torno a la siguiente premisa «si una herramienta está por debajo de nuestras necesidades o por encima, no la usaremos«.
Esto puede llevarnos a pensar que «mejor que sobre que falte«. Puede ser, pero es necesario contar con un incremento del costo de aquellas herramientras que se nos queden grandes para la operativa del negocio. Queremos transformar digitalmente la empresa, no quemar el capital.
Es muy común poder contar con un gran abanico de posibilidades en cuanto a herramientas se refiere, por tanto, exploremos bien cuáles necesitamos.
6. Los procesos han de cambiar antes de las herramientas
Antes de explorar las herramientas que tenemos disponibles en el mercado, debemos hacer un análisis exhaustivo de los procesos de la operativa de la empresa y ver cómo cambiar los que necesitemos. Una vez que los procesos se hayan convertido en nuevos procesos o en procesos adaptados al cambio, trataremos de adquirir las herramientas necesarias.
Piensa por ejemplo que estás haciendo dropshipping y en que primero adquieres un software para gestionar pedidos, pero ni siquiera tienes un proveedor, mal asunto, ¿verdad?.
Ten en cuenta que no todo se puede digitalizar o automatizar, siempre va a haber tareas que no puedan cambiar. Pero sí que vas a poder implementar algunos cambios que pueden ser muy importantes para libraros de las tareas repetitivas en las que no aportáis valor, y ganar tiempo para dedicar a las actividades en las que sí marcáis la diferencia.
7. Cuando implementes el cambio, analiza su progreso eventualmente
Y es que los cambios no se producen de la noche a la mañana, vas a necesitar seguramente algunos meses, depende de la envergadura de los mismos, claro. Es recomendable ir estableciendo algunos objetivos que los nuevos cambios han de cumplir y analizar su progreso según los vayamos implementando.
En esta etapa nos va a tocar hacer pruebas a diario y así poder ir mejorando los cambios. No debemos ponernos nerviosos, al comienzo es muy común que no salga todo bien. Para eso es esta punto, para corregir todos los errores incipientes que vayan surgiendo
Estas pruebas las podemos hacer precisamente en un entorno de pruebas. Por ejemplo, si estamos implementando una herramienta nueva para nuestro software, será mucho más controlable en un ecosistema mucho más pequeño donde examinar bien, qué tal está funcionando. Este ecosistema puede ser, por ejemplo un servidor local donde no tengamos a los clientes.
8. Evita el cortoplacismo a toda costa
Desde un punto de vista filosófico, todos sabemos que las prisas no son buenas y que si pretendemos tener buenos resultados con prontitud estaremos cayendo en el dilema del «empresaurio«, que no empresario. O como algunos también dicen «emprendices«. Y es que solamente pensando en el futuro lograremos poder adoptar las decisiones que acabarán siendo las mejores para nuestra empresa.
Es importante no entender la transformación digital como una acción puntual, sino considerarla un proceso continuo, en constante evolución. Tienes que entender la digitalización de tu empresa como una gran oportunidad de mejorar todos los días.
Si consigues transmitir esta mentalidad de querer hacer las cosas cada vez mejor tienes mucho ganado. Esto requiere una actitud abierta a la crítica constructiva y al cambio. Hay que estar constantemente en busca de fallos, y no verlos como errores sino como posibles puntos de mejora.
